El scrum es un elemento crucial del rugby. Llevarlo a cabo bien es sin duda una clave para el éxito; hacerlo mal puede resultar en desastre, tanto en resultados como en la confianza del equipo. El scrum es sumamente demandante sobre el físico de los jugadores; buena parte de la preparación pueden hacerla los mismos jugadores en el ginmnasio, fortaleciendo su núcleo muscular y desarrollando sus capacidades aeróbica y anaeróbica. La fuerza del núcleo muscular (el torso, particularmente los músculos del abdomen, pecho, cuello y espalda) es especialmente importante porque la absoluta rigidez corporal es indispensable en en la complicada ecuación que hay que resolver en cada scrum. Sin embargo, no siempre es posible esa preparación física. Por ejemplo, el entrenamiento con pesas en el gimnasio es una cuestión debatible para los jugadores de divisiones juveniles, y jamás debe emprenderse un plan de acondicionamiento físico en el gimnasio sin una previa consulta médica. Debería caer por obvio (pero lo que abunda no daña) decir que bajo ninguna circunstancia, excepto bajo consejo y estricta supervisión médica, ningún jugador debe tomar ningún tipo de suplementos. Buena alimentación y adecuado descanso son más que suficientes, y es indispensable recordar que los anabolizantes anquilosan los cartílagos del crecimiento (es decir, impiden crecer precisamente en la etapa del desarrollo físico).
El scrum, con su complejidad relativa, tiene tres factores clave. En orden de importancia:
- Seguridad
- Timing
- Técnica
Los requerimientos físicos puestos sobre los jugadores en el scrum son muy serios, en particular sobre la primera línea. Por lo tanto es indispensable que los jugadores sean físicamente capaces de soportar estos requerimientos y tengan la técnica para resolverlos favorablemente. La importancia de esta cuestión está demostrada, por ejemplo, por el hecho de que la NZRU (la unión de rugby de Nueva Zelandia) ha publicado lineamientos en los que, entre otras cosas, requiere a los entrenadores que eviten colocar jugadores juveniles con cuellos largos en la primera línea. Al hacer esta recomendación, aparentemente obvia, queda claro que la NZRU entiende que el conocimiento específico de cómo opera el scrum no está de ninguna manera ampliamente difundido.
El scrum es un ambiente poco hospitalario, y entender como funciona, su mecánica, sus límites, el sentido de las fuerzas en oposición, el acoplamiento frontal y transversal, y los riesgos implícitos, ayudará a prevenir accidentes. Quien esto escribe cree que en el rugby los accidentes son, en realidad, muy pocos. Muy pocas de las cosas que suceden y que terminan en lesiones de los jugadores pueden calificarse de hechos fortuitos, así como hay pocos "accidentes" aéreos. Hay errores, fallas de preparación, desatenciones, negligencias, y solo en una proporción muy pequeña verdaderos accidentes. Repetir las normas y prácticas de seguridad hasta convertirlas en instinto, prepararse adecuadamente, y estar con la cabeza en el juego no solamente evitarán "accidentes", sino que también permitirán desarrollar el scrum como excelente plataforma para el juego ofensivo.
Imagen: Crusaders vs. Brumbies, 12may2006 © 2006 Maree Reveley. CC-by-sa, tomada de http://commons.wikimedia.org/wiki/Image:Scrum.JPG
4 comentarios:
LA 96 DE CIUDAD FELICITA A TODOS LOS MIEMBROS DE LA 93, Y POR SUPUESTO A PARTIR DEL LUNES VERAN UNA NOTA CON LA INCLUSION EN EL BLOG DE SU LINK Y LA DIFUSION EN NUESTRO BLOG DEL "TREMENDO VIDEO" QUE HAN FILMADO (ESTO SI NO MEDIA OPOSICION POR PARTE DE UDS).
EL RENEGAU (ADMINISTRADOR DEL BLOG)
Por supuesto, Renegáu, será un gusto que incluyas el video; no creo que Aldo, el autor, tenga ninguna objeción ;)
Ninguna objeción, todo las fotos y videos míos están a disposición de cualquiera que disfrute con ellos.
A propósito, Quique te estás demorando en subir alguna fotito.
Aldo
Gracias, Aldo!
De las fotos estoy haciendo una pequeña selección, y algunos retoques, para ir publicándolas.
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